UCRANIA: “En el frente de la caridad, abriendo las puertas a todos”

en el frente de la caridad abriendo las puertas a todos 01

 

(28/02/2022) La invasión rusa a Ucrania, ha movilizado la vida y el servicio de los sacerdotes orionitas en Kiev y Lviv y de las Pequeñas Hermanas Misioneras de la Caridad en Korotycz y Kharkiv, una de las ciudades más afectadas por el ataque.

El Director General P. Tarcisio Vieira y el padre Giovanni Carollo, director de la provincia religiosa “Madre de la Divina Providencia” de la que depende la misión orionita en Ucrania, están en contacto con los sacerdotes de Don Orione presentes en Kiev y Lviv.

En un principio se decidió que el padre Moreno Cattelan y el clérigo Mykhailo Kostiv dejarán Kiev para unirse a los cohermanos en L’viv para que puedan estar todos juntos. Pero teniendo solo la mitad del tanque de combustible disponible, debieron regresar a L’viv.

Las Pequeñas Hermanas Misioneras de la Caridad también lograron ponerse en contacto con las hermanas en Kharkiv, una de las ciudades más afectadas por el ataque ruso, y en la cercana Korotycz. La hermana M. Kamila de Kharkiv informó que se despertaron por la noche con el sonido de los disparos. La situación es muy delicada. El cardenal pidió a las hermanas orionitas de las dos comunidades que se reúnan todas en Korotyc, porque se considera más seguro y donde, entre otras cosas, las monjas tienen un espacio subterráneo que utilizarán como refugio en caso de peligro. A las Hermanas, pertenecientes a la provincia polaca, se les preguntó si preferían volver a Polonia, pero todas optaron por permanecer cerca de las madres, los niños y los pobres que cuidan.

 

en el frente de la caridad abriendo las puertas a todos 01

 

Luego de algunos días, han logrado transportar a los 8 residentes del Hogar junto a tres operadores y un voluntario. Llegaron a la frontera con Rumania, que está a unos 300 km de Lviv. Donde fueron recibidos por el padre Valeriano Giacomelli, director de la Casa Orionita de Oradea, en Rumanía.
De esta forma, los religiosos orionitas en Ucrania pueden dedicarse a tiempo completo a la acogida de las familias que buscan refugio. Los primeros en llegar fue una familia refugiada de Kiev. Luego tres familias de Kerson cuyas casas fueron bombardeadas y planean llegar a L’viv.
“Y es de noche otra vez –relata el padre Moreno Cattelan- La segunda noche de batalla para todos. Estamos ahí… en el frente de la caridad, abriendo las puertas a todos.”

Los superiores generales de los Hijos de la Divina Providencia y de las Pequeñas Hermanas Misioneras de la Caridad, Don Tarcisio Vieira y Madre M. Mabel Spagnuolo expresaron la cercanía de toda la Familia Carismática Orionita a los religiosos y sacerdotes orionitas y a la población ucraniana, asegurando oraciones por la paz.

Al igual que los sacerdotes orionitas, las hermanas también pidieron rezar mucho.

El medio Avvenire publicó una entrevista con el padre Moreno Cattelan, misionero orionita en Ucrania. Este es el texto del artículo:

Cae la tarde cuando en la ciudad de Lviv el silencio irreal de estos días suspendidos es desgarrado por el grito de las sirenas. De momento, esta localidad de 900.000 habitantes, a unos setenta kilómetros de la frontera con Polonia, se ha salvado de los bombardeos rusos, pero aquí todo el mundo sabe que, tarde o temprano, también les tocará a ellos. Y sus corazones saltan cada vez que suena la sirena. Y ayer sucedió tres veces. “Es prácticamente el único sonido que se escucha en una ciudad desierta donde reina un silencio fantasmal”, dijo el padre Moreno Cattelan, un sacerdote orionita de 63 años originario de la provincia de Padua, en Ucrania desde hace 17 años. En Lviv (L’viv en el idioma local), los padres de Don Orione administran la parroquia, el oratorio y el Centro de la “Divina Providencia”, una estructura que alberga a ocho hombres con discapacidad. Es por ellos que Don Moreno regresó apresuradamente de Kiev, después de un viaje aterrador que duró 18 horas, recorriendo poco más de 500 kilómetros. «El primer día de la guerra -dice el cura- me despertaron a las 5.30 los bombardeos. De acuerdo con los superiores, con quienes estoy constantemente en contacto, he decidido regresar a Lviv para estar cerca de nuestros asistidos”.

El padre Moreno y los cohermanos italianos son la única familia de estas personas, los últimos de los últimos en un país que no tiene estructuras dedicadas a su acogida y cuidado. Afortunadamente, los orionitas están presentes en Lviv, con su servicio pastoral y social, ahora se han convertido en un punto de referencia para la comunidad. El Centro y el monasterio donde viven los padres también fueron construidos en terrenos donados por la Municipalidad. Y desde ayer, además de personas con discapacidad, acogen a una familia de refugiados, mientras que otros llegarán hoy y en los próximos días.

“La gente está aterrorizada y no podemos abandonarla -retoma Don Cattelan, que en Padua tiene cinco hermanos y muchos amigos que oran por él-. Soy consciente de los riesgos que corro y de que, quizás en un minuto, podría estar muerto. Pero todo esto lo vivo con mucha serenidad y libertad, seguro de estar en las manos de Dios. Aquí en Ucrania – continúa el sacerdote – tuve Covid y estuve diez días en el hospital, sin saber si saldría y cuándo. Pero yo estaba tranquilo, como lo estoy ahora. Este es un Covid un poco diferente -bromea Don Moreno- pero quiero vivirlo con la misma libertad de corazón, que es lo que me da fuerzas para estar cerca de mis hijos. No tienen a nadie más y este es mi lugar. Las bombas y los tanques no me impresionan -concluye el sacerdote orionita-. En mi mente, sin embargo, quedaron grabadas las miradas aterrorizadas de los muchos, muchos niños que, en el camino para venir aquí, vi escapar agarrados al cuello de sus madres. Un pueblo que huye de la muerte y de esta cosa tan insensata e inhumana que se llama guerra».

 

en el frente de la caridad abriendo las puertas a todos 01

 

INFO: donorione.orgP. Favio Peloso

Más novedades

“Arrojémonos al fuego de los nuevos tiempos.”

El P. Tarcisio Vieira anunció la Asamblea General de Verificación que se celebrará en Claypole, del 24 de octubre al 2 de noviembre de 2025. “animando a toda la Familia a caminar con renovada confianza y entusiasmo.”

Mirar hacia lo Alto y descender a la tarea cotidiana

Con una jornada cargada de espiritualidad y compromiso, culminó la XI Asamblea General del MLO. Los participantes provenientes de todo el mundo, cerraron este significativo encuentro reforzando su identidad y su vocación de servicio.